Elevación de mamas o mastopexia o pexia mamaria se realiza como solución a una ptosis mamaria o caída del pecho de la mujer.
La importancia de la mama femenina tanto desde los puntos de vista funcional y erótico-sexual es tan acusada , que cualquier variación o alteración en su tamaño y forma tiene una sensible repercusión psíquica en la autoimagen. Sin embargo debemos señalar que las alteraciones del equilibrio emocional no sólo dependen de la magnitud del defecto, sino sobre todo de la actitud de la pareja hacia el defecto.
La ptosis mamaria puede definirse como el descenso o desplazamiento vertical del polo inferior de la glandula o del complejo areola-pezón (CAP) hacia el surco submamario. En casos extremos llega a adquirir la apariencia de un saco vacío.
Las causas de ptosis pueden ser fisiológicas o patológicas:
Técnica quirúrgica empleada para la elevación de mamas:
El objetivo ha de ser:
La mayoría de los casos la ptosis es más a expensas de exceso de piel, pérdida de los tejidos de sostén e involución de la glandula.
El tratamiento quirúrgico consiste en la resección de la piel sobrante, fijación de la glandula a la fascia del pectoral, reconstrucción del elemento glandular en una forma más cónica y una posición más alta.
Si el volumen de la mama es menor de lo normal, debe realizarse un implante de protesis mamaria, por esa razón se denomina mastopexia mas implante.
Postoperatorio de una elevación de mamas:
Entre las posibles complicaciones pueden aparecer hematomas, seromas, hipertrofia de cicatrices, cicatrices inestéticas, evitables o minimizables con el elevado sentido de responsabilidad y autocrítica estética del cirujano.
Lo más importante es el cerebro y las manos del cirujano que sostienen el bisturi, esto marca la diferencia en este tipo de operaciones.